Costa Rica y México ingresan por primera vez al top 10 de los países más felices
- En conjunto, los países latinoamericanos muestran un mejor posicionamiento en el ranking. Se enfoca en el bienestar reportado por las personas en más de 140 países.
- Esta es la publicación más importante a nivel mundial sobre el bienestar y el progreso humano, hecha a partir de un enfoque que atiende a las experiencias de vida de las personas.
POR Redaccion,
19:36 - 21 de Marzo del 2025
El Reporte Mundial de la Felicidad (WHR, por sus siglas en inglés), refiere una mejora de varios países latinoamericanos en materia de felicidad: Costa Rica pasó del lugar 12 al 6; México, ascendió del lugar 25 al 10, Brasil lo hizo del 44 al 35.
Estos cambios responden al efecto combinado de incrementos en la felicidad reportada por los ciudadanos de estos países y de deterioros sustanciales en la felicidad reportada en otras partes del mundo -principalmente en los países anglo-sajones-.
Esta publicación es posible gracias a la asociación entre la Red de Naciones Unidas para el Desarrollo Sustentable, Gallup y el Centro para la Investigación sobre Bienestar de la Universidad de Oxford, así como un grupo de destacados especialistas y académicos que integran el Consejo Editorial del Reporte.
El estudio de este año fue sobre “compartir con y mostrar afecto a otros”. De manera particular, la medida en que las personas se brindan afecto y aprecio entre sí y comparten experiencias y recursos, ofrece evidencia sobre algunas de las diferencias observadas en los niveles de felicidad, entre personas, grupos sociales, y países. Los principales hallazgos de cada uno de los capítulos son los siguientes:
- Compartir las comidas con otras personas es importante para la felicidad. Con información de 142 países se ha encontrado que este acto tan sencillo pero significativo está fuertemente asociado con la felicidad, con una relevancia comparable al impacto del ingreso y del desempleo. Los países donde las personas comparten más comidas tienen niveles más altos de contacto social y reciprocidad, y niveles más bajos de soledad. Destaca el aumento en la frecuencia de los estadounidenses que comen solos.
- Vivir en compañía de otras personas contribuye a la felicidad. El tamaño del hogar y los vínculos familiares se relacionan con la felicidad. Un tamaño de hogar de alrededor de 4 miembros se correlaciona con niveles más altos de felicidad. Las personas que viven solas a menudo experimentan niveles más bajos de felicidad, principalmente debido a menores niveles de satisfacción relacional. También, las personas en hogares muy grandes pueden experimentar menos felicidad, vinculado, en parte, a una satisfacción económica disminuida. En América Latina, los hogares están integrados, en promedio, por 4 personas, lo que contrasta con países europeos donde los hogares unipersonales cada vez son más prevalentes. Además, en Europa, las personas que viven solas reportan menos satisfacción con la vida que las personas que viven en una situación similar en México.
- Las conexiones sociales mejoran la felicidad de los adultos jóvenes. La conexión social protege a las personas de los efectos del estrés y mejora el bienestar; sin embargo, la desconexión social predomina en la mayoría de las regiones del mundo y está aumentando entre los adultos jóvenes. La formación de amistades reduce la probabilidad de desarrollar síntomas depresivos en los jóvenes. No obstante, muchos jóvenes subestiman la capacidad de empatía de sus pares, lo que los conduce a evitar el contacto con otras personas y, en consecuencia, a perder oportunidades de establecer relaciones significativas.
- El apoyo a los otros, o cómo el comportamiento pro-social reduce las muertes por desesperanza. En muchos lugares del mundo se ha venido observando un aumento en lo que se conoce como muertes por desolación o desesperanza (deaths of despair, como se les denomina en inglés), que representan una expresión de infelicidad extrema. El estudio destaca que el comportamiento prosocial, como hacer donaciones, el voluntariado, y ayudar a desconocidos, son comportamientos y prácticas que pueden incidir en una reducción en este tipo de fallecimientos.
- Desconfiar de otras personas, o cómo la infelicidad y la desconfianza subyacen al surgimiento de los movimientos populistas. En este análisis se muestra cómo un bajo nivel de satisfacción con la vida y en la confianza social promueve una orientación política hacia partidos antisistema, ya sea de izquierda o de derecha. En Europa, la ciudadanía con bajos niveles tanto de satisfacción con la vida como de confianza social, tienden a votar por partidos de extrema derecha. Mientras que, en el contexto del sistema bipartidista de EE.UU., ese perfil de votante tiende a abstenerse del sufragio y retirarse de la vida pública.
- Donaciones de alto impacto, o cómo convertir el dinero en mayor felicidad para otros. La investigación de felicidad permite establecer criterios para que las donaciones tengan un alto impacto de bienestar. Muchas organizaciones benéficas quieren contribuir al bienestar de otros, y el capítulo muestra que se pueden diseñar estrategias para que estas donaciones mejoren sustancialmente la felicidad.
*Si te ha resultado interesante este artículo, te animamos a seguirnos en TWITTER
y a suscribirte a nuestra NEWSLETTER DIARIA.
RRHHDigital
ENVÍE SU COMENTARIO