El simposio iberoamericano busca identificar recomendaciones viables para pactar conjuntamente una hoja de ruta Iberoamericana y un programa regional para invertir en cuidados, con el objetivo de ofrecer nuevas oportunidades de ocupación que refuercen el empleo decente de las personas trabajadoras domésticas.
En el marco del Simposio iberoamericano: Invertir en cuidados para hacer del trabajo doméstico un trabajo decente, el Director General de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), Gilbert F. Houngbo, afirmó que el trabajo doméstico ha estado históricamente marcado por la precariedad y la falta de trabajo decente.
Durante la sesión virtual de apertura del encuentro, añadió: “En América Latina y el Caribe estamos hablando de unos 15 millones de mujeres que tienen altas tasas de informalidad, trabajan largas jornadas y con bajos salarios”.
La OIT destacó la necesidad de contar con políticas transformadoras para generar mejores oportunidades de empleo entre las personas trabajadoras domésticas que realizan gran parte de las tareas de cuidados en los hogares, al iniciar un simposio iberoamericano con representantes tripartitos en esta ciudad colombiana.
Houngbo participó junto a Ministros del Trabajo de España, Colombia, Chile, Argentina, México y Uruguay, en este foro, que en su parte presencial reunió hasta el pasado jueves en Cartagena a representantes de gobiernos y de organizaciones de empleadores y de trabajadores.
El Director de la OIT destacó que tras la crisis por la pandemia, “una recuperación centrada en el ser humano requiere inversiones en políticas de cuidados transformadoras para generar empleo de calidad y la plena integración de las mujeres en el mercado laboral, y un elemento clave de esta estrategia es garantizar la protección de los derechos de las personas en trabajo doméstico”.
Recordó que en 2011 fue adoptado el Convenio 189 de la OIT sobre trabajadoras y trabajadores domésticos . “Aunque se han logrado avances innegables, aún queda mucho por hacer para garantizar que todos los trabajadores domésticos tengan acceso a un trabajo decente”, agregó.
La OIT ha destacado que la crisis provocada por la pandemia puso de relieve el papel fundamental que desempeñan las personas trabajadoras domésticas, en la mayor parte mujeres, en el apoyo a las necesidades de cuidados de los hogares.
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