Bajo la expresión Ser joven no te hace invencible, el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS), a través del Consejo de Salud Ocupacional (CSO) lanza una campaña para que las personas jóvenes que incursionan en el mercado laboral tengan acceso a ambientes de trabajo seguros y saludables, en busca de garantizar su bienestar presente y futuro.

De acuerdo con el CSO, las personas trabajadoras de todas las edades pueden lesionarse en el trabajo, pero las personas jóvenes pueden verse expuestos a un riesgo mayor, factores como la inexperiencia, carencia de formación, concienciación sobre el peligro y exposición a trabajos más peligrosos, derivan a que el número de accidentes y enfermedades se encuentre al alza en este grupo poblacional.

"La juventud es una etapa en donde las personas experimentan un serie de cambios en su desarrollo personal y emocional, además, entre los 18 y los 35 años las personas incursionan por primera vez en el mercado laboral, aspirando a tener acceso a oportunidades de crecimiento en sus entornos laborales, este periodo de primeras experiencias debería desarrollarse en ambientes de trabajo seguros y saludables, pues la seguridad y salud en el trabajo es un derecho humano fundamental, que buscar garantizar el bienestar presente y futuro", expresó Alejandra Chaves, directora ejecutiva del CSO.

Por su parte, Wálter Villalobos Fernández, viceministro de Trabajo dijo que bajo el precepto de que los jóvenes constituyen la fuerza laboral del futuro, cobra relevancia la urgencia de trabajar en acciones preventivas, pues un riesgo laboral, sea un accidente de trabajo o una enfermedad profesional pueden condicionar el resto de la vida.

Esta campaña busca fomentar la identificación e intercambio de buenas prácticas para salvaguardar el bienestar de estas personas trabajadoras, a través de tres ejes temáticos:

1. Un llamado a las personas involucradas a prevenir riesgos laborales en los trabajadores más jóvenes, para tomar acciones que permitan cerrar las brechas que exponen a esta población a factores de riesgo como, por ejemplo, la falta de experiencia profesional. También, la importancia de escuchar a la persona trabajadora joven para asegurar la comprensión de sus necesidades.
2. Fomentar el involucramiento de las personas jóvenes. Esta población comprende mejor que nadie la realidad de su vida laboral, y su opinión y sus ideas deberían ser el eje de las iniciativas para que su seguridad y salud en el trabajo estén garantizadas.
3. Por último, se trata de incentivar entre las personas jóvenes que la prevención es clave para alcanzar los sueños a futuro. "Lograr la seguridad de la generación actual de trabajadores jóvenes es también invertir en la seguridad de las generaciones futura", finalizó la Directora Ejecutiva del CSO.

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